Un delirio tremendo de arroz y nada y nadando se aleja y se cae en un agujero. Y del agujero salen plumas y las plumas le divierten y le hacen cosquillas mientras cantan sonatas con sabor a pistacho. Entonces aparece una multitud errante y el aire se convierte en revistas con gente desnuda. Y todo baila y se contonea, y alguien se hace pis y alguien grita hasta darse la vuelta. El calor abarrota y una costra de vino hace críticas constructivas y un cigarro quema una casa y una catarata se vuelve siniestra. Todo es de color verde, menos las musarañas y un ángel perdido aprisiona en sus manos un bosque de llaves. Ya ves, todo esto y nada de esto.

No hay comentarios: