Lengua te llamas, aunque tu madre no te lo puso.

Tu Lengua lengüea poniendo una alfombra roja mojada por donde piso.
Tu Lengua palpita, como un ser vivo autónomo, articulado.
Tu Lengua se viste de smoking y me deslumbra con galanterías.

A veces, me dejas entrar en tu boca y llamarme Lengua también, por contagio. Y entonces Tu Lengua se baña en mi saliva y chapotea.

Lengua te llamas, aunque tu madre no te lo puso.
Lengua, lengua, lengua. Yo te bautizo.

No hay comentarios: