Si no tienes motor, chúpate un dedo y busca las corrientes,
como encender un mechero, pero al revés
abre los brazos y déjate despegar.
Si no puedes pide soplidos, porque igual hoy no corre aire.
Y pilota, balancéate, cómete una nube
y cuando te canses déjate caer, colócate la ropa y vuelve a casa
pero mañana te espero otra vez, planeando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario